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No diría que son lugares, más bien personas, experiencias, aromas, sensaciones... Pero cada relato es ambientado en el respectivo paisaje.
Me inspiran esos momentos felices junto a personas especiales, incluso las conversaciones dolorosas.
Me inspira un corazón roto, una lagrimilla derramada por la risa, el calambre en el diafragma por tanta carcajada, las mariposas en el estómago a causa de algo nuevo y excitante.
Me inspira la lluvia y el aroma sensación que deja a su paso. El café negro en día lluvioso (o nublado) o el jugo de uva.
Me inspira esa canción que escucho a menudo a causa del clima,
me inspira esa noche en la carretera con esa canción que quedó perfecta.
Me inspiran esas personas con quienes el momento nunca es será amargo,
es más, endulzan mis días.
Me inspira la vida, las emociones, las pequeñas cosas, los pequeños detalles.
Una palabra de aliento, una sonrisa, una mirada.
El apoyo incondicional, un hombro donde llorar.
Me inspira también el silencio en buena compañía, largas conversaciones en vela...
Ese roce de dedos, una caricia a mi cabello.
Me inspira todo eso y seguro hay más...
Me inspiras tú que me lees y dejas lindos comentarios. Me inspiras a seguir adelante. |
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Quisiera mencionar a cada una de las personas que también inspiraron este texto y me han ayudado a escribir muchos otros más. Quisiera agradecer uno a uno. No puedo porque seguro se me escaparía alguno, pero esas personas saben quiénes son.
Chicos, les agradezco por todo.
Son enormemente especiales.
1 comentario:
¡hola! a mí me inspiran el verano, los amaneceres, la gente... las cosas como esta, los textos tan especiales. tienes mucho talento.
un beso.
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