viernes, 26 de septiembre de 2014

Mi corazón también se marchó.

Perdóname querido, perdóname corazón. No sabía lo que hacía, creí que ya todo estaba bien. Creí que él ya estaba en el olvido, que ya nunca soñaría con él. Nunca creí que el sentimiento por él seguía latente y que si bien él se había ido, mi corazón se había marchado con él. Perdóname cielo, perdóname vida. Sonará a tópico: no eres tú, soy yo.
Perdona esto corazón.

Perdona que no pueda olvidar su voz al cantar o la armonía de su risa. Perdona que aún se me enchine la piel al recordar su mirada. Perdona que extrañe su sonrisa, que hasta la fecha considero la octava maravilla. Perdona haber creído que él ya no existía en mi vida. Perdona querido, pero tampoco eres el único sorprendido.


Perdóname cielo, perdóname vida.
Perdona querido, perdóname amor.



Retro Machine | via Facebook


Gracias a Abi por sus aportes a este texto.